Orientada hacia una fusión sin precedentes entre el mundo real y el virtual, esta tecnología podría tener, según un estudio de la célebre consultora Accenture, un impacto mundial en volumen de negocios de más de 14 trillones de dólares para el año 2030.
Industrial Internet of Things es una de las manifestaciones más poderosas de la Industria 4.0. Se trata de una tecnología que hace posible, no sólo la interacción de toda clase de objetos entre sí, sino también su conexión a Internet y a otras plataformas analíticas. Su objetivo es optimizar procesos, flexibilizar operaciones, reducir costos y maximizar los rendimientos del sector industrial.
De esta forma, al poner en permanente comunicación sensores, máquinas, vehículos y computadoras, el IIoT crea redes de dispositivos inteligentes que colaboran entre sí en las distintas etapas de trabajo. Ágil, versátil y confiable, esta tecnología esconde el potencial de desencadenar cambios colosales en cada una de sus aplicaciones; entre las que pueden destacarse:
Íntimamente asociado a otras innovaciones de vanguardia como Big Data y Machine Learning, el IIoT es un fenómeno inédito llamado a generar nuevos modelos de negocio, transformar la fuerza de trabajo y acelerar el desarrollo de tecnologías aplicadas en los más diversos campos de la Industria. Su potencial es tan vasto como decisivo su elemento clave: los datos.
Efectivamente, el IIoT se sostiene en base a una constante producción, comunicación y gestión de datos, en correspondencia con las necesidades, posibilidades y conveniencias del sistema. La autonomía de cada elemento queda supeditada a la productividad del conjunto al que pertenece y, para esto, la información en tiempo real es absolutamente crucial.
Aunque parezca increíble, los únicos límites para el IIoT serán aquellos que la imaginación no esté dispuesta a superar. Nada que represente un verdadero obstáculo para los tecnólogos. Gracias a ellos, la Cuarta Revolución Industrial ya ha comenzado.