ABC del Blockchain: definición, funcionamiento y aplicaciones

Conocida por hacer posible la aparición de las criptomonedas como Bitcoin, la tecnología Blockchain sigue ampliando el campo de sus aplicaciones y parece estar llamada a convertirse en el nuevo estándar de seguridad en almacenamiento de datos.

El sistema Blockchain, o cadena de bloques, es una base de datos compartida entre varios usuarios que funciona como una suerte de registro online de operaciones de compraventa u otro tipo de transacciones, en donde todas las acciones quedan registradas: operaciones, cantidades, fechas y participantes, entre otros datos. Cada uno de los bloques de esta cadena es codificado mediante criptografía por lo que resulta prácticamente indescifrable, y además es distribuido al conjunto de todos los usuarios, de tal forma que la cadena nunca se almacena en una sola computadora. Se trata de una base de datos segura, abierta y pública.

En efecto, la autenticidad del Blockchain no queda verificada por un tercero sino por el consenso del conjunto: es la misma red de usuarios la que participa en ella. Una vez introducida, la información queda registrada en múltiples respaldos y no puede ser eliminada ni modificada; sólo se puede añadir nueva información, ya que los bloques están conectados entre sí. Una modificación en una de las copias no tendría sentido: las actualizaciones deben escribirse en todos los respaldos. Esto le otorga gran confiabilidad al sistema: al ser inalterable, la información resulta inviolable.

El potencial de la tecnología Blockchain es extraordinario y hace tiempo que trascendió el estrecho ámbito de las criptomonedas. Transparencia, seguridad, distribución y trazabilidad, son algunos de los numerosos atributos por los que la cadena de bloques despierta un interés cada vez mayor en los más diversos sectores como, por ejemplo, los relacionados a la salud, derecho, estado, etc. Además, en combinación con otras tecnologías de punta como la Inteligencia Artificial y el Big Data, el Blockchain promete alcanzar logros colosales influyendo en las más diversas esferas, desde el ecosistema Fintech al sector energético, desde la identidad digital a las operaciones logísticas, e incluso en lo referente a los procesos electorales por Internet.

Aunque los partidarios del Blockchain aseguran que esta tecnología podría llegar a ser tan disruptiva como la aparición de la World Wide Web en la década de los 90, otros especialistas sugieren adoptar una actitud más prudente y esperar a que siga evolucionando para comprobar qué respuestas ofrece realmente.